Ser recién casado es un momento tan especial para cualquier pareja. Independientemente del tipo de boda que tengáis o de lo largo que haya sido el proceso de planificación, después de dar el «sí, acepto» es probable que experimentéis sensaciones dichosas que solo una pareja de recién casados entiende. Aunque después de la boda habrá un montón de gente que querrá charlar y recordar el hermoso día con vosotros, es importante descubrir por qué debes pasar el tiempo de recién casados a solas.
Por qué debes pasar el tiempo de recién casados a solas
He aquí siete razones por qué debes pasar el tiempo de recién casados a solas.
Es un momento de felicidad
La primera razón para disfrutar del tiempo a solas como recién casados es sencilla: es un momento de pura felicidad. Después de lo que seguramente ha sido un día increíble lleno de amor, risas y lo que se convertirá en atesorados recuerdos, se siente muy bien pasar tiempo a solas con la persona por la que lo has hecho todo. Es una felicidad que no se puede replicar del todo, así que disfruta de ella todos juntos antes de tener que volver a la «vida real».
No estarás muy solo el día de tu boda
Otra razón por la que deberíais disfrutar de vuestro tiempo a solas como pareja después de la boda es porque el día de la misma, os sorprenderá ver el poco tiempo «a solas» que realmente tenéis. Aunque el día se centre en los dos que se casan, rara vez estarán solos. Ya sea con el fotógrafo, con el grupo de la boda o con otros seres queridos a vuestro lado, es difícil robar tiempo a solas en un día tan ajetreado. Eso hace que este tiempo juntos justo después de la boda sea aún más precioso.
El estrés de la boda desaparecerá
La planificación de una boda no suele ser un paseo. De hecho, en la mayoría de los casos puede llegar a ser un poco estresante, especialmente durante la semana del evento. Por esa razón, es muy agradable pasar tiempo juntos después de que el estrés de la boda haya terminado oficialmente. Muchas parejas afirman que durante el proceso de planificación de la boda acaban discutiendo o incluso se pelean. Es probable que esto se deba a que las emociones están a flor de piel en torno a un acontecimiento tan significativo y de gran envergadura. Una vez terminada la boda, cualquier tensión que haya podido surgir desaparecerá.
Podéis desconectar juntos
Es divertido relajarse juntos después de un evento que exige tanto tiempo y atención. Aunque las bodas son divertidas, también son agotadoras. Entre posar para las fotos, charlar con los seres queridos, salir a la pista de baile y el ajetreo general que exigen las bodas, estaréis más que preparados para relajaros en los días siguientes a vuestros votos.
Os sentiréis unidos y podréis planificar vuestro futuro
Una boda significa comprometerse con el otro en el futuro. ¿Qué mejor manera de conmemorar ese sentimiento que pasar tiempo juntos? Os dará la oportunidad de relajaros, poneros al día y establecer objetivos e intenciones para el futuro juntos.
Podéis continuar la celebración
Aunque las campanas de boda hayan terminado de sonar, no tenéis por qué dejar de celebrar un momento tan especial en vuestra vida. En los días inmediatamente posteriores a las nupcias, seguid brindando con champán, celebrando vuestro amor y disfrutando de la compañía del otro. Al fin y al cabo, ¡sólo os casáis una vez! No lo dejes pasar sin celebrarlo como es debido y reconocer lo importante que es.
Puedes reflexionar sobre el día
Tu boda es un torbellino de emociones, así que puede ser agradable sentarse juntos y reflexionar sobre el día. Intercambiad anécdotas, mirad las fotos y tomad tiempo juntos para apreciar el amor que habéis dado y recibido ese día mientras avanzáis juntos en vuestra relación. Es probable que haya momentos que te hayas perdido y que tu nuevo cónyuge pueda compartir contigo y viceversa, por lo que será divertido revivir cada recuerdo desde el punto de vista del otro.
Aunque no vayan a pasar la luna de miel directamente después del día de la boda, pueden dedicar un tiempo a solas. Una forma de hacerlo es planear una miniluna en los días posteriores a la boda. Hagan un viaje de pocos días para escaparse unos días y relajarse juntos después del gran día. Si eso no es posible, planifica una comida romántica a solas el día después de la boda o incluso prolonga tu estancia en el hotel uno o dos días para tener unas vacaciones juntos. Sea lo que sea lo que os funcione, procurad tener ese tiempo a solas para asimilarlo todo. Recordad lo especial que es el día de vuestra boda y esa sensación de recién casados.