Lo vemos en las películas, lo escuchamos en las canciones, vemos a nuestros amigos y familiares pasar por ello, y lo vivimos. El amor está en todas partes, y es una de las cosas que casi todas las personas tenemos en común: queremos amar y ser amados a cambio.Encontrar a «la persona» parece ser una búsqueda en la que se encuentran muchas personas en un momento u otro, desesperadas por encontrar a sus verdaderos amores. Sin embargo, una cosa que he observado es que cuanto más se obsesiona alguien con ello, menos probable es que lo encuentre. El verdadero secreto es seguir los consejos para encontrar el amor de tu vida.
Consejos para encontrar el amor de tu vida
Si estás saliendo para encontrar al elegido, ten en cuenta estos consejos para encontrar el amor de tu vida.
Piensa en lo que quieres
Cuando estás soltera y buscas el amor, es fácil ver más allá de los defectos de las personas. Pero, si estás buscando a la persona ideal, deberías tomarte el tiempo necesario para considerar qué es lo que quieres y necesitas en una relación y en la vida. Esta es la mejor manera de asegurarte de que la persona con la que sales merece tu tiempo y energía.
Hay algunas preguntas que deberías hacerte cuando salgas con alguien para encontrar a la persona ideal. Entre las cosas que debes tener en cuenta están tus valores, tus objetivos vitales, tus responsabilidades y tus pasatiempos. Por ejemplo, si quieres casarte, tener hijos y establecerte en los suburbios, no saldrías con alguien que no quiere tener una familia y planea vivir en el centro de la ciudad.
Sal a buscar lo que deseas
La única manera de conocer a la persona adecuada es exponerte, porque, seamos sinceros, es muy poco probable que aparezca en tu puerta.
Hay muchas formas de exponerse, pero mi favorita siempre ha sido hacer las actividades que siempre te han gustado. Por ejemplo, si te gusta bailar, sal a bailar. Si te gusta leer, únete a un club de lectura. ¿Te gusta el deporte? Únete a una liga local. Nunca se sabe dónde se vas a conocer a la persona indicada, así que lo mejor es salir y divertirte.
Otras formas de salir a la calle son utilizar aplicaciones y sitios web de citas, estar abierto a citas a ciegas y hacer saber a tus amigos y familiares que no sólo estás disponible, sino que estás buscando activamente.
No te quedes en casa
Supongamos que sabes lo que quieres y que has tenido algunas citas pero, por alguna razón, nadie te parece lo suficientemente bueno. Tal vez todavía no has encontrado a la persona indicada, pero quizá nadie te parece lo suficientemente bueno por algo que te ocurrió en el pasado.
Mucha gente arrastra el bagaje de viejas relaciones y malas experiencias que distorsionan su percepción de cualquier nuevo interés amoroso. ¿Podrías estar haciendo lo mismo? Es importante no insistir en cosas que han sucedido en antiguas relaciones, como asumir que toda persona que bebe es un alcohólico abusivo sólo porque tu último novio lo era. Sé inteligente y mantén tus valores, pero trata de no insistir en el pasado. Eso no sería justo ni para ti ni para tu cita.
Sé sincera
Las citas deberían ser divertidas, no estresantes. Si has estado saliendo con alguien y no es lo que esperabas, o no estás disfrutando de tu tiempo con él o ella, no hay nada de malo en separarse. Puede parecer que has perdido el tiempo o que es más fácil seguir adelante, pero si no está funcionando, te debes a ti misma y a la otra persona el terminar cuanto antes. Es decir, ¿por qué torturarte en una relación dramática si no es lo que quieres a largo plazo?
Sé tú misma
Si encontrar al elegido es tu objetivo principal cuando sales con alguien, debes ser tú misma en todo momento. ¿Qué sentido tendría engañar a alguien haciéndole creer que eres algo que no eres cuando tienes la esperanza de pasar el resto de vuestra vida juntos? La verdad acabará saliendo a la luz, y cuando lo hagas, podrías arruinar la relación.
Además, si tienes que fingir algo que no eres, esa persona no merece tu tiempo. Habrá alguien ahí fuera para ti que te querrá tal y como eres.
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Vive tu vida
Tratar de encontrar al elegido puede convertirte fácilmente en una obsesión. Tal vez pensabas que ya estarías casada o tienes planes de tener dos hijos antes de llegar a los 40 y, sin embargo, aún no has encontrado al elegido. Lo entiendo: el tiempo es precioso y muchos de nosotros somos impacientes. Pero obsesionarse con intentar encontrar al elegido no va a servir de nada. En todo caso, va a hacer que se demore aún más.