Ya sea tu anillo de compromiso o alianza de boda, definitivamente deseas aprender cómo limpiar un anillo de diamantes. Para asegurarte de que se mantenga en las mejores condiciones posibles, debes cuidarlo bien, lo que incluye una limpieza regular.
Limpiar tu anillo de diamantes es algo más que mantener su apariencia. Las joyas sucias pueden ser un caldo de cultivo para las bacterias, que en realidad pueden causar irritación de la piel. Y aunque es poco probable que tu diamante se dañe por el uso regular, los residuos cotidianos de jabones, lociones o alimentos pueden dañar la banda de metal precioso.
Cómo limpiar un anillo de diamantes
Aunque la limpieza profesional es imprescindible en ocasiones, querrás aprender a realizar el mantenimiento regular tú misma en casa. Los profesionales recomiendan limpiar un anillo de diamantes al menos una vez a la semana por tu cuenta.
Afortunadamente, no es tan difícil y no requiere ningún brebaje sofisticado ni productos químicos agresivos. ¡Todo lo que necesitas al momento de saber cómo limpiar un anillo de diamantes es un poco de jabón para platos y un cepillo de dientes de cerdas suaves!
“Con qué frecuencia debo limpiar mi anillo de diamantes”
Como se mencionó anteriormente, lo mejor es hacer una limpieza simple en casa al menos una vez a la semana, pero esto depende. Por supuesto, puedes hacer una limpieza cada vez que sientas que tu anillo está perdiendo su brillo o comiences a notar una acumulación.
Tu estilo de vida será un factor en esto. Si usas tu anillo continuamente y participas en muchas actividades al aire libre o manuales, cocinas regularmente o usas muchos productos para el cuidado de la piel en tus manos, tu anillo acumulará suciedad y mugre rápidamente.
Incluso con un mantenimiento regular en el hogar, querrás llevar tu anillo de diamantes a un profesional al menos una o dos veces al año. Esto se debe a que a menudo hay una acumulación apenas perceptible de suciedad y escombros entre la piedra y el soporte que es difícil de eliminar por su cuenta.
Cómo limpiar un anillo de diamantes en casa
La mejor y más fácil forma de limpiar un anillo de diamantes requiere solo unos pocos artículos domésticos básicos que probablemente ya tengas. Éstos incluyen:
- Jabón para platos u otro limpiador a base de jabón
- Agua tibia, casi caliente
- Un cepillo de dientes limpio y de cerdas suaves.
- Paño sin pelusa, de algodón o de lino
- Una taza o cuenco
Estos son los pasos:
- Rocía un limpiador a base de jabón en tu taza o tazón, y llena el resto con agua tibia, casi caliente, y mezcla.
- Coloca tu anillo en la mezcla y déjalo en remojo durante 20-40 minutos.
- Saca el anillo y usa el cepillo de dientes para frotar suavemente todo el anillo.
- Una vez hecho esto, enjuagael anillo con agua tibia.
- Si aún hay acumulación visible, repiteel proceso con agua limpia.
- Una vez satisfecho, secael anillo.
- Usa un paño de pulir por todas partes una vez seco.
Solo hay algunas cosas a tener en cuenta. Primero, asegúrate de que el jabón que usas no contenga humectantes, ya que pueden dejar una película en el anillo que atenuará el brillo general, exactamente lo que está tratando de evitar. En segundo lugar, asegúrate de usar un cepillo de dientes nuevo y de cerdas suaves y déjalo a un lado exclusivamente para fines de limpieza. Y tercero, no uses toallas de papel para secar tu anillo. En su lugar, utiliza un paño de lino o algodón 100%, ya que otros materiales pueden rayar ciertos metales. También puedes dejar que se seque al aire.
Cómo no limpiar un anillo de diamantes
Hay algunas cosas que debes evitar usar en tu anillo de diamantes. Lo más importante es evitar los productos químicos agresivos como la acetona, la lejía o el cloro. Si bien estos pueden no dañar el diamante, pueden dañar el metal o cambiar su color. También es una mala idea utilizar limpiadores abrasivos o en polvo, como bicarbonato de sodio, pasta de dientes o exfoliantes, ya que pueden rayar la mayoría de los metales.
Además, los limpiadores ultrasónicos también pueden ser peligrosos de usar porque la vibración vigorosa puede hacer que las piedras se suelten. Si bien estos son comúnmente utilizados por profesionales, el joyero generalmente revisará la piedra antes y después de la limpieza para asegurarse de que no se produzcan daños durante el proceso.
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Incluso con limpiezas regulares, debes cuidar tu anillo a diario para minimizar la cantidad de limpieza necesaria. Por ejemplo, quítalo cuando laves los platos o asegúrate de usar guantes. También es una buena idea quitártelo antes de usar lociones o cremas o al cocinar, ya que estos hábitos siempre dejan residuos tanto en las piedras como en los metales preciosos.
Además, si tu anillo está bajo garantía o seguro especial, lee la póliza y ve si debes tener citas de mantenimiento regulares. Y no olvides echar un vistazo profesional a la pieza de vez en cuando. Con todos los consejos anteriores, tu precioso anillo de diamantes debe permanecer en perfectas condiciones durante muchos, muchos años.